jueves, 27 de enero de 2011

Rapsodia para el Che




I

Como amaste a los desheredados,
los desheredados también te aman
y no permiten que te nos vayas
con tu cuerpo cóncavo hacia el silencio.

En las noches de octubre cuando el austro
lame las cicatrices de las ciudades
y pasa por el Tahuantinsuyo
batiendo el gran caracol de la pampa
tu figura luminosa sale al altiplano
donde duermen la hierba mate y los caballos
en el sueño acuchillado del indio.

Te hemos visto emergiendo de la niebla
asomarte al filo de la obsidiana
para hacer como Quetzalcoalt
al hombre en el maíz del tiempo
e irte entre los apalencados y los montoneros
y los resplandecientes cañaverales atlánticos
a descarrilar la historia en Santa Clara.

A los que trinchan nuestro oro y nuestra agua,
a los que encienden el corazón de las salitreras
y degüellan el pongo en la oscuridad
que sepan que tus manos buenas
siguen más allá de la cercenación
que aún nos queda el relente de la plata
cristalizada en tu rostro, Comandante.

II

Ernesto ha doblado en el silencio.
Venga si nunca ha visto el girasol, los puestos de reses en la pampa.
Esta virreinal Argentina cercada de pólvora por Pedro de Mendoza.
Buenos Aires es eterna, Bahía Blanca, los gauchos del Rosario.

Todas esas verdades que sabían Alberto Granados y tú
a lomos del asma y la bicicleta
mientras caía lentamente la llovizna
en los ojos temblorosos de Chichina.

Voy a brindar del agua de vida por Ernesto
en la cacharrita de la guerrilla de Ñacahuasu
sin mujeres ni organillero
que bailen los solos de bandoneón.

Lloverá sobre las ciudades de Corrientes,
sobre tanta gente decapitada
y solo nos queda que aparezcas
junto al llanto del compadrito hacia Sorrento.

III

Venías con el relente de la plata
cristalizada en tu rostro, Comandante
para abrirles la puerta a los padecedores
del hambre oscura del corazón

y decirnos hecho fuego bajo la estrella
que estábamos bebiendo tu plenitud,
que estábamos bebiendo de la plata
cristalizada en tu rostro, Comandante.

Pedro Llanes, poeta villaclareño. Con este poema ganó el concurso de poesía Ciudad del Che (2003)

lunes, 17 de enero de 2011

Los monólogos de Calderón




Francisco RIVAS LINARES

El monólogo sigue predominando en los tinglados de la política nacional. Se empeñan en vernos como una masa informe, incapaz de dilucidar sobre los aconteceres provocados por las aplicaciones torpes y desmesuradas de un (des)gobierno consolidado en sus tres áreas de poder: el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial

Todos ellos trabajan pensando en su futuro político y económico. Ofrecen una personal servidumbre hacia los dueños del “poder real”, denigrándose en la incondicional prontitud por atender con cumplimiento puntual a sus demandas excesivas.

Frente al espejo se lanzan autoelogios y proclamas para convencerse de sus propias mentiras, idean trucos manipulativos para persuadirnos de que nos están sirviendo y nos ofrecen justificaciones que por aberrantes, resultan propias para enajenados. Así, el señor Felipe Calderón en su mensaje del 2 de enero, vuelve a la carga con sus aseveraciones para embarcarnos en sus delirios. Nos dijo, con verbos incluyentes, que estamos avanzando por la ruta correcta; que seguiremos combatiendo con firmeza a los criminales y los vamos a derrotar; que sabemos de la necesidad de acabar con la impunidad y la corrupción; que juntos vamos a construir el México de progreso, de justicia y seguridad; que estamos en mejores condiciones para que 2011 sea un año de realizaciones y que, por lo tanto ya estamos en la senda del crecimiento.

Estamos, seguiremos, sabemos, vamos… son verbos conjugados en la primera persona del plural que tanto gustan a los políticos tramposos, para hacernos creer que juntos-todos gobernamos y decidimos.

Y siguió divagando frente la lente con su karaoke televisivo: “Muchos jóvenes, dijo, quieren seguir superándose en la escuela y cursar una carrera universitaria; otros mexicanos quieren tener su casa propia y sacar adelante a su familia; muchos más quieren mejorar en su empleo, o emprender su propio negocio. El año que inicia será tiempo de cristalizar todos esos planes”.

Entrado en frenesí, nos aseguró que facilitará las condiciones “…para que más familias puedan cumplir su sueño de tener su casa propia, y lo haremos –así lo dijo- poniendo al alcance de más mexicanos los servicios de salud: médico, medicinas, hospitales, tratamiento, para quien los necesite”.

Eterno monólogo de la presidencia. Exposiciones motivacionales detestables en grado sumo por ser una retórica vacía, infestada de mentiras y engaños. ¿Quién le cree a Felipe Calderón con su mitomanía y sarcasmos, sembrador de odios, menosprecios, degradaciones y vilipendios hacia los mexicanos?

No se quema los labios cuando nos habla de un progreso que por ilusorio, se abstiene de decirnos desde dónde y hacia dónde. No es posible creer en un líder fraudulento que ha dejado transcurrir su tiempo dándonos un trato desdeñoso e indiferente. Un personaje que postula caprichos a rajatabla.

Este año será repetitivo. El mismo círculo expresivo. Los mismos exhortos. Idénticas convocatorias. Michoacán seguirá siendo el blanco de sus ímpetus vengativos, pues siempre fue, y lo seguirá siendo, un perdedor en su propia tierra.

Concluyo con la expresión de un deseo:

POR UNA SOCIEDAD SIN AGACHADOS: ¡NO MÁS SANGRE! ¡BASTA DE SANGRE!

sábado, 15 de enero de 2011

Entre mula y mula sólo las patadas se oyen




Francisco RIVAS LINARES

Los gobiernos del PriAn hicieron de la
corrupción un modo de relación social,
de vida y práctica gubernamental.”



Entre mula y mula sólo las patadas se oyen. La referencia popular se ajusta al pleito que se libra actualmente entre “ilustres” exponentes de los partidos políticos del Revolucionario Institucional y Acción Nacional.

Boquiflojos, se dan con la sartén de las descalificaciones. Atrapados en la red de la violencia instalada por Felipe Calderón, rescatan el pintoresquismo del añejo perfil político de los dinasaurios.

No resultaría difícil reconstruir el proceso etiológico de su barbarie, ya que sus voces y sus acciones han quedado indelebles en el memorial de la ciudadanía; complejos emocionales que, de manera cíclica, suelen reventar este par de hermanos putativos.

Si Acción Nacional desde su nacimiento debió plegarse “… a las reglas del juego político, sin cuestionar su funcionamiento ni las bases normativas del sistema, contribuyendo así a su estabilidad y legitimidad; ajustándose asimismo a los requerimientos del régimen autoritario que se creó después de la Revolución”*, es de entenderse la complacencia mutua (PRI.PAN) en situaciones de alto riesgo que les implique la pérdida del poder, anteponiendo intereses partidistas a los correspondientes de las bases populares.

No se desconoce el motivo ideológico opositor que le animó frente al corporativismo y la tesis socialista del cardenismo; lo que se enfatiza es su proclividad al ajuste conforme a las circunstancias que lo influyen. Su actitud antigobiernista se modifica a partir de la dirigencia de Christlieb Ibarrola (1962-1968), cuando se crean los diputados de partido.

La simulación siempre ha sido a conveniencia. Se turnan en el intercambio de las descalificaciones, pero llegan finalmente al feliz concubinato. Ambos se procuran para mayoritear en las cámaras en perjuicio de los gobernados, para después tornar a su golpeteo hipócrita.

Así han logrado la privatización de la banca (que por cierto nos ofrecen los peores servicios y las más altas comisiones del mundo); el endoso a todos los contribuyentes de la deuda de los banqueros saqueadores, en detrimento de la hacienda nacional (Fobaproa); la legitimación del presidente espurio Carlos Salinas, correspondiendo al PRI hacer lo propio con Felipe Calderón (dice Moreira que el PRI jamás estará de rodillas, pero bien que sirvió de banquito para el encumbramiento de quien ahora critican); la impunidad convenida para Mario Marín y Ulises Ruiz; las reformas al régimen de pensiones en beneficio único de la clase patronal; la licitación de los contratos integrales de servicios en perjuicio de Pemex y el consecuente beneficio de empresas trasnacionales; el aval conjunto para la celebración del Tratado de Libre Comercio, sin garantizar seguro alguno en favor de nuestros productores agrícolas; el disimulo con que dejaron correr la licitación 21 para beneficiar a los cárteles empresariales; en fin.

Y en un contexto de rispidez, ahora nos ofrecen otra más de sus escenas broncudas atizándose con los adjetivos más ocurrentes. Así Humberto Moreira Valdés, en exhibición de músculo, tachó a los panistas de montoneros, pero –según su dicho- “… tengo para todo el gabinete nini de Calderón, porque ni sabe ni puede”.

Al Secretario de Trabajo y Previsión Social, Javier Lozano, le recomendó que “lo sano es que no hable, porque él formó parte de ese pasado que critica” y que recuerde que “su barriguita se llenó con el salario de ese pasado del que habla”. Al Secretario de Educación Alonso Lujambio lo calificó de inmoral por aceptar un puesto para el que no tiene la capacidad ni el talento y que en las fiestas del bicentenario “se le cebaron muchos cohetes”.

A Moreira los etiquetaron de “protagonista cavernario que pretende engañar a la sociedad con guiones falsos”. “El señor es ignorante y mentiroso”, según el propio Lujambio.

El paradigma de Baltazar Gracián, “mesura y prudencia van de la mano con la verdadera inteligencia”, no se les da a estos militantes con ínfulas de encomenderos. Anoréxicos del buen juicio, para cualquier carnaval cualquier tonadilla la convierten en cantaleta.

POR UNA SOCIEDAD SIN AGACHADOS:
¡NO + SANGRE! ¡BASTA DE SANGRE!



*Soledad Loaeza. “El Partido Acción Nacional: la oposición leal en México”, cita registrada por Martha Elisa Nateras González en “Origen y Desarrollo del Partido Acción Nacional. Su Institucionalización y Cambio Organizacional”.